Los grifos sin lugar a dudas, son uno de los elementos indispensables no sólo en cualquier hogar sino prácticamente en cualquier construcción. El poder disponer de agua en todo momento, hace de estos productos algo fundamental para mantener la higiene y poder cocinar, entre otras muchas cosas.
En este artículo, descubrirás el origen de los grifos, los tipos más utilizados, su funcionamiento, cuál es el grifo ideal tanto para tu cocina como para tu baño, y grandes diseños. Aparte, te indicaremos cómo instalar un grifo o arreglarlo si fuera necesario. Por supuesto hablaremos de precios y cómo mantenerlos.

¿Qué son los grifos?

Los grifos son dispositivos que gestionan el caudal del agua que llega a ellos normalmente a través de tuberías.

Aunque son elementos que utilizamos cada día, el modo en el que funciona esta pequeña obra de ingeniería, es bastante desconocida en general. Primero veamos cuáles son los componentes de un grifo.

Partes de un grifo.

No todos los grifos son iguales. Debido a la cantidad de diseños y tipos diferentes, tienen unos componentes u otros. Una de las partes más diferenciales, son las válvulas. Las válvulas de los grifos sirven para dejar pasar el agua una vez que se acciona su mecanismo.

Las válvulas más habituales son las de comprensión, las de bola, las de cartucho de cerámica.

Aquí os mostramos un ejemplo gráfico de cómo es un grifo típico de manivela con su mecanismo.

partes de un grifo

Aunque varios de los componentes de los distintos tipos de grifos sean distintos, es correcto indicar que la mayoría utiliza un sistema común como una palanca o tornillo que produce una determinada fuerza para evitar que el agua fluya de manera constante. Es decir, ese elemento común produce un “taponamiento”.

Cómo funciona un grifo.

Aunque se puede poner un grifo a un bidón, lo normal es que vayan siempre enlazados a tuberías.

Las tuberías destinadas a las griferías, están repletas de agua. Asimismo, esa cantidad de agua mantiene una presión más elevada que el aire que las completa. Gracias a esa diferencia de presión, podemos decir que el agua siempre está lista para poder salir en el momento en el que se “abra la compuerta” (ya sea manilla, rosca, etc…

Si en algún momento, cambiara la presión del aire y ésta fuera superior a la del agua, entonces el líquido no podría fluir. La función principal del grifo es retener el agua.  

Origen de los grifos.

Como sabemos, la palabra grifo tiene la singularidad de ser polisémica. Esto significa que el mismo término tiene distintos significados.

Uno de ellos, ya sabemos cuál es. El otro significado es el de una criatura mitológica mitad pájaro, mitad león.

Y aquí, es cuando viene lo bueno. ¿Tiene que ver algo un significado con otro? Pues parece que sí.

origen de los grifos

Imagen de Maria Orlova

Los grifos (mitológicos), fueron unos motivos artísticos muy populares por parte de la cultura griega y romana los cuales eran utilizados para adornar edificios, casas, palacios y muebles entre otros muchos lugares.

Posteriormente, se volvieron a utilizar en la época medieval. Aquí ya incluían estas figuras en lugares de culto como en catedrales. Su aceptación como motivo decorativo era tal, que incluso comenzaron a utilizar el diseño de los grifos en las fuentes públicas. Es ahí precisamente, cuando surge el otro significado del grifo como llave de paso.

Aunque la derivación de esta palabra es dudosa, se cree que proviene término griego γρυπός (grypos), que significa «curvado», o «ganchudo», lo que explicaría la forma de los grifos.

Tipos de grifos.

El mundo de los grifos es muy amplio. Gracias a la tecnología y a la inversión para crear modelos más eficientes a la par de estéticos, podemos encontrar un amplio abanico de tipos de grifos en la actualidad. En este caso, te pondremos una lista de los más populares.

Grifo Monomando.

Sin lugar a dudas, los grifos monomando son los más conocidos y extendidos. Estos grifos disponen de una única palanca o maneta con la cual controlamos la presión y la temperatura del agua. Es un tipo de grifo muy práctico y habitual en las viviendas.

grifo monomando

Grifo Monomando

Grifo Bimando.

Los grifos bimandos son aquellos que disponen de dos manillas o manetas en las que dependiendo de cuál accionemos, se abrirá el caudal de agua fría o caliente. También pueden abrirse ambas manetas para poder controlar qué temperatura de agua queremos.

Este tipo de grifos son más clásicos y cada vez menos extendidos en las viviendas. Sin embargo, suele ser un tipo de grifo más habitual en cuartos de baños de bares u hoteles. Esto se hace para controlar más el uso del agua caliente y fría.

grifo bimando

Grifo Bimando

Grifos termostáticos.

Los grifos termostáticos son aquellos que disponen de dos manillas. Una para que salga el agua y otra para ajustar la temperatura exacta a través de un mecanismo termosensible.

Al poder regular nosotros mismos la temperatura, evitamos que pueda haber accidentes como quemaduras. Además, este tipo de grifería, cuenta con un sistema de seguridad en la que hay que accionar o pulsar un pequeño botón para poder poner el agua a más de 38º.

Esta ventaja es grande si tenemos niños o personas que por diversos motivos, no sean realmente conscientes de la temperatura, por lo que este sistema, evita muchos percances.

Los grifos termostáticos suelen instalarse para las bañeras o las duchas y van empotrados a la pared.

grifo termostático

Grifo Termostático

Grifos Empotrados.

La grifería empotrada, es aquella que va directamente instalada en la pared. Como acabamos de ver, los grifos termostáticos son así, pero hay otros muchos modelos empotrados que no son termostáticos.

Aunque es un tipo de grifo que estaba más extendido hace unas décadas, es cierto que los últimos años se han puesto de moda y se han creado grandes diseños para poder atender esa demanda.

Además, no debemos olvidar que estas griferías no sólo tienen valor estético sino que también tienen grandes funcionalidades.

Asimismo, dan la sensación de mayor amplitud en el lavabo y la limpieza es más sencilla ya que no hay recovecos.

Desde luego una opción a tener en cuenta.

grifo empotrado a la pared

Grifo Empotrado Monomando

Grifos con sensor.

Estos grifos se caracterizan por no tener ninguna manilla. Se accionan automáticamente a través de un sensor de infrarrojos de movimiento situado en el el cuerpo.

En su interior, pueden tener o pilas o una batería que puede durar años, por lo que el mantenimiento es bajo.

Estos grifos se utilizan principalmente en servicios públicos, en grandes superficies y en la hostelería.

Sus ventajas son ampliamente conocidas.

La primera, es que son muy higiénicos al no haber contacto directo. Esto es muy beneficioso sobre todo en lugares en los que los usen muchas personas.

Por otra parte, se puede decir que son unos de los más sostenibles, ya que el caudal del agua se corta a los pocos segundos de no notar movimiento hacia el sensor. El riesgo de fuga es nulo.

grifo con sensor

Grifo con Sensor

La instalación no es compleja y algunos modelos utilizan baterías que pueden durar hasta 6 años. Otros utilizan pilas.

En muchos tipos, podemos gestionar el caudal de agua que queremos que salga y el tiempo. Hay inclusos algunos que se pueden regular a través de una app.

Por último, debemos saber que hay modelos en los que es posible obtener tanto agua fría como caliente. Esta se regula a través de una pequeña manilla lateral.

Grifos de botón.

Los grifos de botón o también llamados temporizados son los más sencillos que hay. Se accionan pulsando el botón y sale una cantidad de agua determinada. Son utilizados principalmente en instalaciones deportivas públicas y en colegios e institutos. También se pueden ver en la hostelería. No es habitual adquirirlos para una vivienda.

Por otra parte, son los que se utilizan en fuentes de agua para el consumo humano. Aunque algunos tienen opción de agua caliente, no suele ser lo habitual.

Tienen algo en común con los de sensor y es precisamente que cortan el flujo del agua automáticamente al cabo de unos segundos. Son grifos funcionales muy útiles en algunos casos como el de las fuentes.

grifo de botón

Grifo de Botón

Grifos con filtro para el agua.

Los grifos con filtro para el agua son los grandes desconocidos. Este tipo se usa en cocinas y dispone de un sistema para filtrar el agua que se instala  debajo del fregadero.

Al estar conectado el filtro directamente al suministro del agua, hace que sea muy cómodo y práctico.

Pero no sólo la comodidad es fundamental, sino también la sostenibilidad.

Muchas personas deciden comprar agua embotellada porque no les gusta el sabor del agua del grifo debido al cloro, la cal y otros elementos que le aportar mal sabor. Eso provoca un aumento de la producción de plásticos y por consecuencia, una insostenibilidad brutal.

Está claro que los grifos con filtro para el agua deberían estar mucho más extendidos. No sólo por lo comentado anteriormente sino porque también hacen que nos ahorremos mucho dinero.

Sostenibilidad y ahorro es el conjunto perfecto.

Además, el mantenimiento es bajo. Un filtro puede llegar a durar hasta 6 meses, por lo que no hay excusas 😉.

grifo con filtro

Grifo con Filtro

Grifos con caño extraíble.

Los grifos con caño extraíble también están más indicados para las cocinas.

Estos grifos son altamente funcionales, ya que el caño puede ser extraído para múltiples usos. Normalmente son monomandos y hay distintos tipos de caños como: giratorios, curvados, altos o bajos…

Muy cómodos si tenemos un fregadero de dimensiones reducidas ya que nos permite llenar ollas u otros recipientes sin necesidad de introducirlos en el mismo. También hay algunos modelos ampliamente extensibles con los que se pueden llenar cubos que están en el suelo.

Sin duda una opción muy práctica y recomendable.

grifo con caño extraíble

Grifo con Caño Extraíble

Grifos para baños.

Ahora que conocemos los tipos de grifos que hay, llega una pregunta importante. ¿Cuál es el grifo ideal para mi cuarto de baño?

Hay que tener en cuenta que el baño no sólo tiene el grifo del lavabo, sino también el de la bañera o ducha y en algunas viviendas el del bidet.

Dependiendo del estilo de nuestro cuarto de baño, podemos optar por un diseño más rústico o más moderno, pero siempre debemos de adquirir grifería de calidad.

Grifos de lavabo.

En el caso del lavabo, si no queremos complicarnos la vida, podemos adquirir cualquier grifo monomando. Hay multitud de estilos diferentes y el rango de precios es muy amplio. Aquí algunos ejemplos.

grifo monomando

Grifo Monomando

Grifos de ducha.

Por otra parte, para la ducha, nosotros aconsejamos grifería termostática. Sobre todo por su seguridad y funcionalidad.

grifo termostático para ducha

Grifo Termostático para Ducha

Grifos de bidet.

En el caso de los bidets o bidés, recomendamos un monomando con rótula orientable. Esto es que en el extremo por donde sale el agua, tiene una rótula que podemos mover para que el agua llegue a la mayor parte de superficie posible. Es muy práctico y suelen tener buen diseño.

grifo para bidé

Grifo para Bidet

Grifos de cocinas.

A la hora de elegir un grifo de cocina, tenemos que tener en cuenta el espacio del fregadero y el diseño.

Sin duda, nosotros la primera opción que escogeríamos para la cocina, sería un grifo con filtro de agua integrado. Ya hemos comentado todas las virtudes que tiene este tipo de grifería.

En segundo lugar, recomendamos también los grifos extraíbles por su alta funcionalidad .

Todos estos con formato bimando, aunque cualquier opción es válida siempre que tenga calidad.

Aquí algunos ejemplos de modelos increíbles.

grifo para cocnia

Grifo de Cocina Articulado

Cómo desmontar un grifo.

Desmontar un grifo no es una tarea complicada siempre y cuando ese grifo esté en buenas condiciones.

Algunos grifos con el paso del tiempo y dependiendo de la dureza del agua, pueden llegar a acumular mucha cal lo cuál hace que se quede atascado y desmontarlo sea más complejo de lo habitual.

No obstante, te mostraremos en unos simples pasos cómo hacerlo en un grifo monomando.

desmontar grifo monomando

Cómo desmontar un grifo monomando.

Es fundamental que antes de manipular cualquier grifo, cortemos la llave de paso del agua por prevención.

Una vez hecho esto, si vamos a desmontar el grifo completo con los flexos o latiguillos, debemos desajustar estos de las tomas de la pared,

Posteriormente, hay que aflojar una tuerca que está justo debajo del lavabo. Algunas pueden ser aflojadas con un destornillador, pero ahora otras que necesitan una llave distinta, por ejemplo de pico de loro.

Cuando esté todo aflojado, y los latiguillos sueltos, sólo debemos de tirar del grifo y saldrá con facilidad dejando el hueco del lavabo vacío.

Cómo arreglar un grifo que gotea.

Seguro que en más de una ocasión has tenido problemas con algún grifo que goteaba.

En este caso, lo más normal es que se haya partido o agrietado el cartucho cerámico que tiene en su interior.

Para poder arreglar un grifo que gotea, debemos seguir los siguientes pasos.

como arreglar un grifo que gotea

  • Corta la llave de paso del agua.
  • Una vez cortada la llave, localiza en el grifo un pequeño plástico redondo. A veces los grifos lo tienen delante en color azul y rojo y otras veces detrás. Puedes retirarlo con una pequeña palanca de plástico para no dañar el grifo. Va a presión pero no es complicado retirarlo.
  • Introduce una llave allen o destornillador plano (esto depende del grifo) por el orificio que hemos dejado al descubierto. Afloja el tornillo que hay en su interior.
  • Saca la maneta o mango.
  • Retira el embellecedor. Normalmente va a rosca pero otros modelos van a presión.
  • Ahora hay que retirar una tuerca de latón. Puedes hacerlo con una llave de pico de loro.
  • Retiramos la pieza afectada tirando hacia arriba.
  • Colocamos el nuevo recambio ajustándola a la forma del interior del grifo. Es importante que encaje a la perfección.
  • Enrosca la pieza de latón y abre la llave de paso para comprobar que funciona correctamente y que el problema se ha solucionado.
  • Vuelve a montar todas las piezas en sentido inverso.

Cómo limpiar la grifería.

Los grifos, al igual que todos los productos del hogar, necesitan una serie de cuidados, y uno de los más importantes, es la limpieza.

Como indicamos en el artículo de los azulejos, la cal es uno de los enemigos de las cerámicas y también de la grifería.

Si no hacemos un mantenimiento adecuado, los restos de cal se irán acumulando y puede llegar un momento en el que lleguen incluso a estropear nuestra grifería.

Para evitarlo, lo único que tenemos que hacer es limpiar frecuentemente nuestra grifería. Podemos utilizar un jabón neutro.

Es importante limpiar todos los recovecos, por lo que podemos utilizar un cepillo de dientes destinado a este fin y pasar por la base y las rendijas del embellecedor.

Si deseamos un brillo especial, después de limpiarlos, pasa una bayeta con vinagre blanco.

Por otra parte, no creas que con esto ya has limpiado bien todo el grifo.

A veces el agua sale como “partida” o no fluye correctamente. Esto se debe a que el filtro que tiene, está obstruido por impurezas.

Para ello, lo único que tenemos que hacer es desenroscarlo con la ayuda de una llave inglesa y limpiarlo con agua. Si vemos que la rejilla está muy deteriorada o no se eliminan todos los restos, lo mejor es comprar una nueva.

Ahora sí, tenemos ya una limpieza perfecta de nuestra grifería 😉.

Precios de grifos.

Los precios de los grifos son muy variables. No nos cansamos de indicar que hay productos muy económicos, pero al corto-medio plazo lo barato sale caro.

Si hablamos por ejemplo de precios de grifos de cocina, lo habitual es encontrar grifería que esté entre los 90 y los 300€. Por supuesto que hay grifos de cocina más baratos y más caros, pero si hacemos una media, el precio ronda los 190-200 euros.

Por otra parte, si nos centramos en el precio de los grifos de lavabo, los podemos encontrar a partir de los 30€ (luego ya el resultado que den, es otro tema).

Lo habitual, es pagar una media de 70-150 euros. Esto si nos referimos a los grifos monomandos.

El precio de los grifos de pared o murales aumenta en la mayor parte de los casos y se coloca en una media de 180-400 euros.

Si nos centramos en precios de grifos termostáticos, podemos encontrarlos a partir de los 50 €, pero lo habitual es una horquilla de entre 70 y 200€.

Conclusión.                    

Mira tu cuarto de baño y tu cocina, mide el espacio, ten en cuenta el diseño y sobre todo, busca calidad.

Si no te gusta el agua que bebes, adquiere un grifo con filtro. Si quieres un diseño fuera de lo normal, adquiere un grifo mural. Huye de los grifos con mucho plástico y de las malas aleaciones.

Si sigues con dudas, ya sabes dónde estamos o cómo contactar con nosotros. ¡Hasta el próximo artículo!